La Práctica del Earthing
El Earthing o conexión con la tierra, es una práctica sencilla pero poderosa que consiste en ponerte en contacto directo con la superficie de la tierra, caminar descalzo sobre la misma para “enraizarte”, tal como lo haría una plantita.
Según Clint Ober, autor de Earthing: ¡The Most Important Health Discovery Ever! (¡El descubrimiento de salud más importante de todos!), publicado en 2010, la tierra tiene
una carga eléctrica negativa que puede ayudarnos a equilibrar nuestro cuerpo y los beneficios son sorprendentes.
Cuando caminamos descalzos sobre la tierra, nuestro cuerpo puede absorber electrones libres de la superficie terrestre, lo que ayuda a mejorar la circulación, nuestra
postura, aliviar dolores musculares, regular el ritmo cardíaco y reducir el estrés;
además, muchos estudios han señalado que puede reducir la ansiedad y la depresión, mejorar la calidad del sueño y promover una sensación de bienestar físico y emocional.
Este simple acto nos permite reconectar con la energía de la naturaleza, dándonos una sensación de renovación y calma, es como si la tierra nos recargara de energía positiva.
En nuestra vida cotidiana estamos rodeados de superficies artificiales como concreto y asfalto, que nos desconectan de la tierra y la práctica del Earthing nos ayuda a restablecer ese equilibrio perdido. Se recomienda al menos 20 a 30 minutos al día, este tiempo permite que tu cuerpo absorba la energía y comience a restablecer sus ritmos naturales, si puedes hacerlo durante más tiempo los efectos pueden ser aún más notables.
¿Cómo hacerlo? es muy fácil, si estás cerca de la playa, quítate los zapatos y camina, la sensación de la arena bajo tus pies, el sonido de las olas y la brisa del mar te conectan con la esencia de la tierra y si no estás cerca del mar, un simple paseo descalzo en un parque, jardín o incluso sobre la tierra húmeda o el barro puede hacer maravillas.
Tómate unos minutos al día para hacerlo y verás cómo puede tener un impacto positivo en tu vida, ayudándote a sentirte más relajado y en sintonía con tu cuerpo y mente.